En Abril de este año, viajé a la ciudad de Nueva York para asistir a la conferencia de primavera que organiza ¨Learning and the Brain¨,^[1] una fundación creada en 1999 que conecta a los educadores con las últimas investigaciones científicas y prácticas basadas en evidencia científica para mejorar el aprendizaje y las intervenciones en las escuelas. Hay varios centros y laboratorios de investigación como el de Harvard, Yale, MIT, Stanford, UC Berkeley, Columbia, Johns Hopkins, NYU que se suman a los esfuerzos de esta increíble organización para dar formación profesional a educadores de todo el mundo.

Entender como se produce el aprendizaje ha sido la eterna preocupación de la educación. La mayoría de los sistemas educativos actuales se construyeron con las ideas que se tenían hace 200 años acerca de cómo  aprenden los seres humanos. Muchos de esos sistemas, no han cambiado casi nada en todo este tiempo. Sin embargo, los avances en la ciencia muestran que algunos de los principios que animaron la creación de las escuelas, tal como las conocemos, no contribuyen a más y mejores aprendizajes en todos los estudiantes.

La conferencia se tituló ¨El cerebro social y el aprendizaje¨. Fue impresionante escuchar a renombrados investigadores y autores e intercambiar con los más de 1300 asistentes durante tres días.  Lo que ocurrió con la cuarentena y la pandemia en todo el mundo afectó el aprendizaje de los alumnos alrededor del globo. Muchas ponencias mostraron que la privación social y la falta de interacción con los compañeros con las escuelas cerradas tuvo consecuencias negativas que serán muy duraderas en los cerebros y en la salud física y mental de los estudiantes. Lo más maravilloso fue escuchar a autores explicando (con pruebas en cientos de casos) que los comportamientos prosociales como pueden ser cooperar; ser buen compañero; cuidar a otros; hacer amigos; ser solidario, etc. tienen grandes beneficios para aprender mejor.

Es más: la conferencia mostró que un mejor estado de ánimo, un ambiente más alegre donde las emociones son positivas, produce un aumento en la salud física y mental de los estudiantes, y mejora el aprendizaje.

Les estaré contando más detalles en las próximas entradas de este blog.

^[1]https://www.learningandthebrain.com/about-us

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